Los últimos años han sido muy convulsos para el mercado de la automoción, lo que seguramente habrá supuesto un incremento importante en tus costes de compra o alquiler de vehículos.
Esta situación no va a mejorar en el corto plazo y es muy posible que siga encareciéndose progresivamente el uso del vehículo. Los fabricantes han descubierto que, vendiendo menos coches, pueden incrementar sus márgenes y rentabilidad por vehículo, por lo tanto es difícil que volvamos a la situación pre-COVID de los grandes descuentos.
Además, en los próximos años los precios posiblemente subirán (la normativa Euro 7 incrementará los costes por vehículo, debido a mayores sistemas anticontaminación) y por el propio impacto del IPC.
Por todo ello, esta es nuestra recomendación para controlar y optimizar vuestros costes de flota:
- Analiza el coste total del vehículo (cuota, seguro, carburante, gestión de flota, …)
- Considera posibles acuerdos de las compañías de renting con redes de talleres especializados para el mantenimiento (buen nivel de servicio y menor coste).
- Revisa los Kilometrajes y la duración de contratos.
- Controla tu siniestralidad, contrata redes de talleres preferentes con aseguradoras, y vigila la devolución de los coches.
- ¿Has realizado un estudio real de cobertura de proveedores de tarjeta de combustible, con relación a la localización de tu flota?
- ¿Has evaluado externalizar determinadas funciones más transaccionales en proveedores especializados?
- Revisa tu política de flota y categorías
- Negocia con antelación con los fabricantes.
Y, como conclusión, te preguntamos:
¿tienes recursos disponibles para gestionar todo esto?