El 1 de enero del 2025,muchas empresas en España tendrán la obligatoriedad de registrar el cálculo de la huella de CO₂. Esta medida no solo busca una mayor transparencia y compromiso con el medio ambiente, sino que también es un paso decisivo hacia el cumplimiento de los objetivos europeos de neutralidad climática. Para las empresas obligadas, la normativa implicará una nueva serie de responsabilidades y oportunidades. Pero, ¿qué significa exactamente y cómo pueden las empresas aprovechar este cambio normativo?
Tres puntos clave de la nueva regulación:
- Registro obligatorio del cálculo de la huella de CO₂: Muchas empresas deberán calcular y reportar sus emisiones de gases de efecto invernadero. Este paso es esencial para tener una visión clara del impacto ambiental que genera cada actividad empresarial y forma parte del compromiso de España con los objetivos de reducción de emisiones.
- Planes de reducción de emisiones: No se trata solo de calcular, sino de implementar un plan de acción para reducir las emisiones. La nueva normativa exigirá a las empresas demostrar su compromiso con la sostenibilidad a través de proyectos tangibles que reduzcan su impacto ambiental.
- Mayor responsabilidad para sectores intensivos en carbono: Las empresas en sectores que generan un mayor volumen de emisiones, como la industria o el transporte, tendrán una presión adicional para invertir en tecnologías limpias y adoptar medidas de eficiencia energética.
La obligación, un impulso para la descarbonización y la eficiencia
Esta obligatoriedad no solo supone un desafío, sino también una oportunidad para avanzar en la descarbonización, la sostenibilidad y la eficiencia energética. Las empresas que ahora inviertan en proyectos enfocados en reducir sus emisiones no solo cumplirán con la normativa, sino que mejorarán su competitividad, optimizando sus procesos y reduciendo el consumo energético.
¿Cómo hacerlo? Invertir en proyectos de eficiencia energética, energías renovables y tecnologías sostenibles será clave para alcanzar los objetivos de reducción de CO₂. Además, será imprescindible contar con un equipo experto en calcular y gestionar la huella de carbono, para establecer estrategias de reducción eficaces y reales.
Aprovechar las ayudas y los Certificados de Ahorro Energético
No obstante, estos cambios regulatorios no significan que las empresas tengan que asumir estos retos sin apoyo. Existen diversas ayudas y subvenciones públicas que están diseñadas para acompañar a las empresas en su transición hacia una economía baja en carbono. Además, el sistema de Certificados de Ahorro Energético (CAEs) permite a las empresas obtener un retorno económico por cada KW de energía ahorrado a traves de la Eficiencia Energetica.
Para las empresas, es esencial no solo implementar medidas de descarbonización, sino también vincular estas inversiones a los mecanismos de financiación disponibles, tanto a nivel estatal como europeo. De este modo, se pueden convertir los costes iniciales de la transición en un retorno positivo en el medio y largo plazo.
EPSA un aliado experto
En EPSA contamos con una amplia experiencia en el cálculo de la huella de CO₂ y en la optimización de inversiones en proyectos sostenibles. Ayudamos a nuestros clientes a cumplir con las normativas, mientras les orientamos en la obtención de subvenciones y Certificados de Ahorro Energético, maximizando así el retorno de sus inversiones en sostenibilidad.
Aprovechar esta nueva regulación no solo es una cuestión de cumplimiento normativo, sino una oportunidad para ser más eficientes, sostenibles y competitivos en un mundo que se encamina hacia la neutralidad climática.